¿Te has embarcado en la aventura de reformar tu casa? ¡Enhorabuena! Es un proyecto emocionante que transformará tu hogar en el espacio que siempre has soñado. Pero, ¿y si te dijera que puedes vivir en ella mientras la renuevas? Sí, es posible, y te vamos a mostrar cómo.
Vivir en casa mientras se reforma puede ser un reto, pero también una experiencia enriquecedora. Con un poco de planificación y organización, puedes mantener tu vida diaria sin que las obras te pongan en jaque. ¡Prepárate para convertir tu hogar en una obra de arte sin tener que mudarte!
Hacer reformas viviendo en casa
Lo primero que te tienes que plantear es ¿Es buen momento para hacer reformas en casa? Antes de iniciar cualquier remodelación, es crucial considerar el clima exterior. Para renovaciones extensas que involucren derribar paredes exteriores, quitar ventanas o incluso el techo, el clima cálido y seco es ideal.
Evita abrir tus paredes y exponer tus pertenencias, tuberías y cableado durante el invierno, ya que esto puede complicar el proceso y aumentar el estrés.
Vivir con obras en casa no es un paseo por el parque, pero con estos consejos podrás hacerlo más llevadero:
- Planificación es la clave: Define un plan de obra detallado con plazos y fases. Esto te ayudará a visualizar el proceso y a anticiparte a posibles problemas.
- Prioriza las áreas: Concéntrate en reformar una habitación a la vez, dejando las áreas clave funcionales.
- Protege tu hogar: Cubre muebles y objetos con lonas, plástico y cinta adhesiva.
- Organiza tu espacio: Crea un área de trabajo y un espacio para guardar tus pertenencias.
- Mantén la limpieza: Limpia a diario las zonas afectadas por el polvo y los residuos.
- Reserva espacio de almacenamiento: Alquila un trastero o busca soluciones para guardar tus cosas.
- Comunica con los trabajadores: Habla con los constructores sobre las molestias que te puedan ocasionar.
- Mantén la calma: Las reformas son un proceso que requiere paciencia y comprensión.
¿Qué hacer con los muebles en una reforma?
Durante una obra general, es importante planificar bien qué hacer con los muebles para evitar daños y facilitar el trabajo. Aquí tienes algunas opciones:
- Mover los muebles a otras estancias: Si la reforma no abarca toda la casa, puedes trasladar los muebles a habitaciones que no se estén reformando.
- Almacenar en un garaje: Si dispones de un garaje, puede ser un buen lugar para guardar los muebles temporalmente.
- Alquilar un guardamuebles: Otra opción es alquilar un guardamuebles. Estos servicios ofrecen espacios seguros y protegidos para almacenar tus pertenencias durante el tiempo que dure la reforma.
- Proteger los muebles in situ: Si no puedes mover los muebles, cúbrelos con plásticos o mantas protectoras para evitar que se ensucien o dañen.
- Contratar una empresa de vaciado: Para reformas integrales, puede ser útil contratar una empresa especializada en vaciado de pisos, que se encargue de retirar y almacenar los muebles de manera profesional.
Vamos ahora a desarrollar tres puntos que merecen especial atención.
Como Vivir con Obras en Casa
Vivir en una casa en reforma requiere planificación y flexibilidad. El estrés por obras en casa es una afección muy común que puede provocar ansiedad. Aquí hay algunos consejos para hacer que la experiencia sea más tolerable:
Reducir el Ruido
El ruido es inevitable en cualquier proyecto de renovación. Acuerda con tu contratista las horas para los trabajos más ruidosos y considera adquirir tapones para los oídos o auriculares con cancelación de ruidos para minimizar el impacto en tu rutina diaria.
Minimiza Olores y Gases
Los materiales de construcción pueden emitir gases y olores dañinos. Mantén las ventanas abiertas y utiliza purificadores de aire para reducir la exposición a estos olores. Evita productos de limpieza agresivos, ya que pueden irritar y requerir limpiezas más frecuentes.
Cómo proteger la casa en una reforma
Es importante proteger tu casa durante la reforma para evitar daños y accidentes:
- Protege las paredes: Cubre las paredes con plásticos o lonas para evitar manchas de polvo y pintura.
- Cubre el suelo: Protege el suelo con plásticos o alfombras para evitar daños por el paso de los trabajadores.
- Protege las puertas y ventanas: Cubre puertas y ventanas con plásticos o lonas para evitar que se ensucien.
- Aísla el área de trabajo: Utiliza cintas adhesivas para delimitar el área de trabajo y evitar que el polvo se propague.
- Ventila la casa: Ventila la casa a diario para eliminar el polvo y la humedad.
- Contrata profesionales cualificados: Contrata a profesionales cualificados y con experiencia para garantizar que la reforma se realiza de forma segura.
Reformar la cocina viviendo en casa
Reformar la cocina es una de las zonas más complicadas, pero no imposible. Aquí te damos algunas ideas:
- Cocina temporal: Instala una cocina portátil en otra habitación o utiliza la cocina de un amigo o familiar.
- Prepara comidas sencillas: Opta por platos rápidos y fáciles de preparar.
- Utiliza microondas y horno: Aprovecha estos electrodomésticos para cocinar sin necesidad de la cocina.
- Compra comida preparada: No dudes en recurrir a comida preparada o pedir a domicilio.
Reformar el baño viviendo en casa
Reformar el baño también es un desafío, pero con un poco de ingenio puedes vivir sin problemas:
- Baño temporal: Instala un baño portátil o utiliza el baño de un amigo o familiar.
- Utiliza duchas portátiles: Una ducha portátil te permitirá mantener tu higiene sin necesidad de usar el baño.
- Organiza la zona de aseo: Limita el uso del baño a lo esencial y mantén la zona limpia y organizada.
Si crees que todo esto es demasiado, si tu economía te lo permite, siempre puedes recurrir al alquiler temporal por reforma.
Vivir en casa mientras se reforma puede ser una experiencia desafiante, pero también muy gratificante. Con un poco de planificación, organización y paciencia, podrás disfrutar de tu hogar mientras lo renuevas. ¡Recuerda que con estas ideas podrás convertir tu reforma en un éxito rotundo!
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